Con los mejores augurios Feliz Año Nuevo 2022

Se cierra un ciclo y nace otro. Recibamos con júbilo y alegría   el nuevo devenir del Año Nuevo 2022. Dejemos atrás todo lo negativo que nos deja el 2021.

Pero también demos las gracias por los saldos positivos, contados si se quiere, que nos deja el ciclo del Año Viejo. Desde nuestras diferentes trincheras combatamos las pandemias.

No claudiquemos ante el virus del siglo. Blindemos a la familia de los contagios masivos. Tampoco cedamos a las otras pandemias: la inseguridad pública, la impunidad, la corrupción y el torcido estado de derecho que asola a Veracruz.

Al margen de la fobias y filias del gobierno de la cuatroté, debe unirnos la solidaridad, la unidad y el apoyo a los desvalidos, a los menesterosos, a los marginados, proletariados y oprimidos. En cortísimo lapso de 3 años los pobres se hicieron más pobres, cayeron en la pobreza extrema, se multiplicaron, según el INEGI y el Coneval.

La sociedad civil y los ciudadanos de a pie ha sido carne de cañón de la mayoría de las cúpulas partidistas que, cuando llegan al poder público, se olvidan de las demandas y reclamos de una sociedad agraviada por los nuevos ‘mesías’. Son víctimas del escarnio oficial.

Es hora de que salgamos del letargo de los discursos populistas, que solo ofrecen utopías y panaceas que no resuelven de fondo la pérdida del poder adquisitivo de las clases populares. En lugar de reconstruir, destruyen a las instituciones autónomas para someterlas. Lucran del pasado para erigirse en falsos redentores mesiánicos.

Luchemos por un Nuevo Año 2022 en pos de la reivindicación social, con nuevos bríos renovados y un músculo fortalecido por la solidaridad y justicia para los oprimidos, las familias de los desaparecidos por el crimen organizado y los feminicidios. No caigamos en la apatía por los que sufren la impunidad, la intolerancia y los abusos del poder de los nuevos profetas del aparato político estatal.

Seamos mejores ciudadanos. Cuidemos todos. Feliz y venturoso y próspero Año Nuevo 2022. ¡Así sea!         

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