Hallan una antigua ciudad zapoteca del siglo XV en el sur de Oaxaca “congelada por el tiempo”
Una investigación arqueológica dirigida por Pedro Guillermo Ramón Celis, de la Universidad McGill (Canadá), reveló la magnitud de las ruinas de Guiengola, un asentamiento zapoteco del siglo XV en el sur de Oaxaca.
Pese a la evidencia de que hubo una densa ocupación del sitio, se pensaba que Guiengola había servido solo como fortaleza para albergar soldados de la cercana ciudad de Tehuantepec. Ahora los resultados de un escaneo mediante láser aerotransportado, así como de un estudio arqueológico realizado entre 2018 y 2023, permitieron determinar que se trataba de una ciudad fortificada en expansión.
Según Ramón Celis, se determinó que Guiengola tenía una superficie de 360 hectáreas y contaba con más de 1.100 estructuras, entre templos, canchas de juego de pelota, barrios residenciales separados para las élites y los plebeyos, un complejo sistema de caminos e imponentes murallas defensivas que se extendían a lo largo de cuatro kilómetros.
También precisó que ese centro urbano estuvo habitado por casi siglo y medio, entre los años 1350 y 1500, y fue «abandonado unas décadas antes» de la llegada de los españoles en 1521. El arqueólogo sugirió que allí llegaron a vivir «al menos 5.000 personas de forma permanente» durante su mejor época.
Tras finalizar la conquista de la región, los zapotecas abandonaron la ciudad y se trasladaron 20 kilómetros al sur, donde se encuentra actualmente la ciudad de Tehuantepec, para tener un mejor acceso al agua y a tierras cultivables. Sus descendientes continúan viviendo allí actualmente.