No, no fue a Núñez
La Grilla en Tabasco.
No. No fue a Arturo Núñez Jiménez al que atrapó la justicia para ser procesado por corrupción. No se trata del intocable, el que jamás será sometido a debido proceso, a pesar del enorme daño que hizo a los tabasqueños.
El y su esposa, Martha Lilia López Aguilera, la que hace un año estuvo acorralada durante horas en el estacionamiento del Hospital del Niño y que ya no tendrá que volver a desinfectarse las manos por haber saludado a gente humilde, disfrutan de su jubilación multimillonaria.
Ciertamente, están a salvo de mil azotes.
El personaje de la noticia es otro: Genaro García Luna, el ingeniero mecánico que llegó a convertirse en el todopoderoso secretario de Seguridad Pública de México durante el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa.
La periodista estadounidense Ginger Thompson dio la primicia a través de su cuenta de Twitter, al filo de las diez de la mañana de este martes.
La información fue confirmada pronto por la Fiscalía de los Estados Unidos mediante un comunicado. El fiscal para el distrito este de Nueva York, Richard P. Donoghue, declaró que “García Luna está acusado de aceptar millones de dólares en sobornos del Cártel de Sinaloa, liderado por ‘El Chapo’ Guzmán, mientras era responsable de garantizar la seguridad pública en México”.
Thompson, reportera del periódico ProPública, precisó que la orden de captura se ejecutó en Grapevine, Texas.
A García Luna se le imputaron: un cargo por declaraciones falsas y tres por corrupción y narcotráfico, incluyendo los sobornos multimillonarios que aceptó por parte de cárteles mexicanos, durante la “guerra contra el narcotráfico” emprendida por Calderón y ya desde antes, bajo el gobierno de Vicente Fox Quesada.
No es el primer funcionario de primer nivel federal señalado por el gobierno estadounidense por similares delitos, en el transcurso de muchas décadas, pero sí el primero que es aprehendido por el FBI.
De acuerdo con la acusación, de 2001 a 2012, mientras ocupaba puestos de alto rango en el gobierno mexicano, García Luna recibió millones de dólares en sobornos del Cártel de Sinaloa a cambio de proporcionar protección para sus negocios de venta de droga y trata de personas.
Un despacho noticioso de la agencia Prensa Asociada (AP) precisa que en la carta de acusación del Tribunal de Distrito de Estados Unidos, ubicado en Nueva York, se le acusa a Genaro García Luna de mentir y de intentar contrabandear cocaína.
“En o alrededor de enero de 2001 y el presente, ambas fechas son aproximado e inclusivas, dentro de la jurisdicción extraterritorial de los Estados Unidos, el acusado Genaro García Luna, junto con otros, conspiró para distribuir una sustancia controlada a EU, sabiendo que dicha sustancia se importaría ilegalmente a los Estados Unidos. El delito involucró una sustancia que contiene cocaína”.
Añade que “aproximadamente el 1 de junio de 2018, dentro del Distrito Este de Nueva York y en algún otro lugar, el acusado Genaro García Luna hizo a sabiendas e intencionalmente una o más declaraciones y representaciones materialmente falsas, ficticias y fraudulentas, en un asunto dentro de la jurisdicción de la rama ejecutiva del Gobierno de los Estados Unidos: una declaración al Servicio de Aduanas e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS), en que el acusado declaró y representó falsamente a los agentes que nunca había cometido, ayudó a cometer o intentó cometer un delito, cuando, de hecho, el acusado en ese momento sabía y creía que había cometido uno, ayudó a cometer e intentó cometer crímenes y ofensas”.
La acusación y captura de García Luna pegó muy fuerte en la línea de flotación del principal político opositor al actual gobierno. Si se profundiza en las investigaciones o en el transcurso del proceso a que será sometido, aparecerán nombres de gobernadores, mandos militares y policiales de los estados y municipios, así como de jueces y, ¿por qué no?, ministros de tribunales de justicia mexicanos.
¿Hasta dónde llegan las ramificaciones del caso? En Tabasco se sabe que al menos las autoridades que dejaron de serlo hace un año nunca vieron o a propósito no quisieron ver, o callaron merced a sobornos, ante el tráfico de drogas y otras actividades criminales.
Twitter: @JOchoaVidal