Bajo protesta Trump firma ley de gastos; aboga a los republicanos por más poder
Trump dijo a la comunidad latina de que su partido no les ha dado la espalda. FOTO: DAVID MCNEW / GETTY IMAGES.
- El mandatario culpó a los demócratas de bloquear un arreglo para el programa de «acción diferida» de 2012, que él mismo desmanteló en septiembre de 2017, y envió un mensaje directo a los Dreamers y a la comunidad latina de que su partido no les ha dado la espalda
LA OPINIÓN / WASHINGTON- A sólo horas de que el gobierno federal agotara sus fondos, el presidente Donald Trump firmó este viernes una ley de gastos por $1,3 billones pese a su previa amenaza de veto, “descontento” por el bajo nivel de fondos para su prometido muro fronterizo y la exclusión de un arreglo para DACA.
Trump firmó la ley de gastos de 2,232 páginas, que fue aprobada en horas de la madrugada por el Senado y, antes de eso, por la Cámara de Representantes. En su cuenta en Twitter, Trump amenazó con un veto presidencial, que por cuatro horas puso al gobierno al bordo de un tercer cierre parcial.
“Hay muchas cosas con las que estoy descontento en este proyecto de ley, hay muchas cosas que no debimos tener en este proyecto de ley, pero en cierto sentido estuvimos obligados a hacer si queremos construir nuestro Ejército”, explicó Trump.
Al final, explicó que la urgencia de los fondos militares superó su malestar por el proyecto de ley, que incluye el mayor gasto de defensa en la historia reciente del país.
La ley de gastos fue aprobada esta madrugada en el Senado en una votación de 65-32, poco después de superar el drama generado por el senador republicano por Kentucky, Rand Paul, quien amenazaba con bloquear el voto por su aumento del gasto fiscal. La Cámara de Representantes aprobó la iniciativa el jueves, en una votación de 256 votos a favor y 167 en contra.
Sin embargo, Trump advirtió de que esta será “la última vez” que firma un proyecto de ley semejante, a la vez que solicitó al Congreso que elimine el reglamento que permite el bloqueo de votos -conocido en inglés como “filibuster”-, y que le dé autoridad para eliminar dentro de las leyes de gastos aquellos “renglones” con los que no esté de acuerdo, sin alterar la medida entera.
La medida le otorga $1,600 millones para la seguridad fronteriza que incluye un incremento del 10% para la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) y que, según dijo Trump, son una “prima inicial” para su prometido muro fronterizo, cuya construcción comenzará el lunes próximo.
“No estoy contento con los $1,600 millones pero sí comienzan (la construcción del) muro”, dijo Trump, acompañado de varios miembros de su Gabinete.
La ley, sin embargo, estipula la construcción de “barreras físicas” y el reemplazo de vallas ya en pie en la frontera sur, pero no del tipo de muro de concreto o de los prototipos construidos en el área de San Diego (California).
El mandatario nuevamente culpó a los demócratas de bloquear un arreglo para el programa de “acción diferida” (DACA) de 2012, que él mismo desmanteló en septiembre de 2017, y envió un mensaje directo a los Dreamers y a la comunidad latina de que su partido no les ha dado la espalda.
Trump impuso un plazo para el pasado 5 de marzo para que el Congreso encontrara una solución legislativa permanente para DACA, pero sendos dictámenes judiciales obligaron al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) a reactivar el programa.