-Sheinbaum y la Reforma al Poder Judicial
Solamente faltan 49 días para que Andrés Manuel López Obrador tenga que dejar el cargo de Presidente de la República y que Claudia Sheinbaum Pardo inicie actividades como la primera mujer en esta importante y trascendente encomienda.
Uno de octubre de este 2024, fecha histórica para este país, por ser una mujer la que ocupara la silla presidencial. Y fecha también a partir de la cual la titular del Poder Ejecutivo recibirá una serie de graves problemas que le hereda su antecesor, entre los que está la aberrante “reforma” al Poder Judicial Federal, aberrante no porque este Poder no la necesite, sino por lo que esta llamada “reforma” realmente intenta hacer.
El elegir por voto directo por parte del burlonamente calificado “pueblo bueno y sabio”, como lo define el actual Ejecutivo Federal, es otra de sus ocurrencias que han sido calificadas por los especialistas en la materia del Derecho a nivel nacional e internacional como una acción muy peligrosa por los riesgos que implica como: desaparecería la carrera judicial por lo que la experiencia que se requiere para la interpretación del Derecho y por tanto impartición de justicia desaparecerían; se perdería la independencia al interior del Poder que es necesaria para tener una imparcial impartición de justicia; existe el riesgo de la injerencia de grupos de poder que pueden ser desde los grandes consorcios privados nacionales e internacionales, hasta la delincuencia organizada. Riesgos que solamente pueden calificarse como el intento de debilitar y por tanto desaparecer la independencia del Poder Judicial y con ello la gradual eliminación de la incipiente democracia que desde el año 2000 hemos vivido los mexicanos.
Siendo lo citado el verdadero motivo de esta mal llamada “reforma”, ya que si realmente se quiere combatir la corrupción no es quitando su trabajo a aproximadamente 5,025 juzgadores a nivel de los estados y 1,688 de nivel federal, lo que da un total aproximado de 6,713 mexicanos calificados con estudios en materia jurídica, a los que sin motivo alguno se les dejaría sin trabajo. Forma muy cuestionable de combatir la corrupción.
Es por lo anterior además de las consecuencias que en materia económica la llamada “reforma” al Poder Judicial Federal puede llegar a tener. Ya que el Gobierno Federal actual se caracterizó por el no respeto al Estado de Derecho principalmente con empresas extranjeras y sí a nivel de los mercados internacionales llega el mensaje del debilitamiento de la democracia en México, el problema que tendrá que enfrentar la virtual presidenta electa de este país, va a ser bastante grave.
Por el momento será el próximo jueves 22 de agosto, la fecha en que se votará en la Cámara de Diputados la llamada “reforma” al Poder Judicial Federal, la que debido a la docilidad de los “representantes populares” de Morena, seguramente se aprobará con las consecuencias que la mayoría de ellos no tienen idea en que consisten y que sucederá. Tratará de evitar esta debacle la próxima Presidenta de México, está a tiempo. Usted qué OPINA, estimado lector. Hasta el viernes. Noti-sigloxxi@hotmail.com