En la calma chicha
La Grilla en Tabasco.
Hoy deseo compartirles un testimonio, relevante a la luz de la situación en que nos encontramos, y también datos que divulgaron este miércoles la Organización de Naciones Unidas y sus organismos filiales.
En principio, luego de enterarnos de que durante el fin de semana en los más grandes almacenes del país hubo “compras de pánico”, tal como ha sucedido en otros países, a las nueve y media de la noche del martes entramos en Walmart Carrizal con el propósito de comprar algo de lo básico para un mes. No había muchos compradores. A decir verdad, eran pocos.
Observamos que el único anaquel vacío era el de pan Bimbo, como sucede un 24 o 31 de diciembre, y no hay toallitas Lysol ni productos similares con cloro. Le preguntamos al personal. Nos dijeron que en el transcurso de estos días recientes ha habido más clientela que lo habitual, pero más temprano.
No obstante, el misterioso caso de la compra de papel sanitario no lo vi. Hay abundancia en todas las marcas. Asimismo, hay abastecimiento más que suficiente en cuanto a productos de limpieza, latas de atún y sardina, carne, pescado, pollo, frijoles, arroz, verdulería, agua, refrescos, leche, cremas, congelados, etcétera, etcétera. No se observan indicios preocupantes, en lo más mínimo.
Más tarde acudimos a dos farmacias distintas y tampoco existe escasez notoria. Echamos gasolina sin problema alguno (18.99 Premium). Noche y día, los negocios de comida funcionan con normalidad. De día, menos tráfico. Tal vez porque muchos padres de familia prefieren proteger a sus hijos en casa. Este miércoles compré gas y recibí el suministro -carísimo, para variar- en tres cuartos de hora.
Por mientras, continuamos a la espera de lo que decidan hacer las autoridades federales y locales. El Tribunal Superior de Justicia siguió el ejemplo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (primero) y de la Suprema Corte de Justicia de la Nación: se suspenden actividades y tiempos judiciales hasta el 20 de abril, pero permanecerá personal de guardia.
En Tabasco, el gobierno confirmó un caso de COVID19 en Cárdenas. El gran problema, aquí y en el resto del país, según advertencia de la Organización Mundial de la Salud, es que se espera para actuar solo cuando se detectan casos sospechosos -como uno de una escuela primaria en Comalcalco- en vez de ir pasos adelante y aplicar pruebas entre diversos grupos poblacionales, aunque no hayan viajado a Europa ni presenten síntomas.
A propósito de esto último, con la toma de temperatura en el aeropuerto, por ejemplo, se soslaya el hecho de que un individuo puede estar contagiado hasta por dos semanas sin presentar síntoma alguno.
A continuación, datos divulgados por ONU y sus filiales, más allá de la numeralia propia del COVID19:
En el mundo, la crisis creada por el coronavirus hará que entre 5.3 y 24.7 millones de personas pierdan su empleo. Durante la crisis financiera de 2008-2009, suscitada al romperse la burbuja hipotecaria en Estados Unidos, el desempleo mundial aumentó en 22 millones, advierte la Organización Internacional del Trabajo.
Comienzan los ensayos para una vacuna contra este virus, al tiempo que surge en Filipinas uno más, el H5N6, que es mutación del H1N1 que en México mató a unas mil 700 personas y en el mundo a entre 115 mil y 500 mil, sin que se pueda precisar ese dato. Otro potencial motivo de preocupación global.
La OMS dice que lidera el esfuerzo mundial para analizar la eficacia de tratamientos y eficacia de tratamientos y ensayos de la vacuna. “Aunque el COVID19 afecta más a los mayores, no se debe descuidar a los niños y jóvenes, ya que se han visto casos mortales”.
Millones de migrantes sufren las consecuencias del coronavirus: tan solo en este continente, desde los venezolanos que cruzaban diariamente a Colombia y les han cerrado la frontera, a los trabajadores que perderán sus empleos en países como Estados Unidos y no enviarán más remesas.
Acotación a propósito de las últimas declaraciones matutinas: ojalá ser honesto, o declararse no corrupto, y portar amuletos, sirviera para quedar a salvo ante la pandemia. Los gobernantes y los ciudadanos en general debemos ser muy responsables, muy prudentes, en lo que decimos y hacemos.
Twitter: @JOchoaVidal