Chocan Yunes Linares y García Jiménez por la política del ‘garrote’ contra opositores en Veracruz

• En respuesta, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez calificó su amplia perorata como “un show”, una clara estrategia para tratar de desviar la atención pública y mediática de sus hijos prófugos de la justicia.

Gaudencio García /

12HORAS / XALAPA, Ver.-Elexgobernador panista Miguel Ángel Yunes Linares y el gobernador morenista Cuitláhuac García Jiménez chocan por la “persecución política” contra los opositores y consanguíneos en Veracruz.      

Acostumbrado al poder público o privado, exitoso empresario desde la época del político priista hidalguense Jesús Murillo Karam -hoy sujeto a proceso por ‘La verdad histórica de los 43 de Ayotzinapa’-, el exgobernador panista Miguel Ángel Yunes Linares lanzó una advertencia de tres bandas:

-“Nunca me he metido con los hijos de un adversario; es una bajeza. Se metieron con los míos. Aunque sea lo último que haga en la vida se los cobraré a todas y a todos los agresores, no tengan duda (…)”.

– “En lugar de dedicarse a gobernar y a enfrentar con talento los problemas graves que afectan a Veracruz están dedicados a sacar sus odios y complejos. Nada es para siempre, tampoco el poder”.

El neopanista, quien hace 20 años abandonó al PRI por esta fecha tras ser expulsado de las filas del longevo y del entonces vigoroso partido gobernante que dirigía el tabasqueño Roberto Madrazo Pintado, salió a defender a sus hijos Miguel Ángel y Fernando de los delitos que le imputa el aparato judicial de la entidad.     

En medio de la estridencia política, Yunes Linares  acudió a la fiscalía general del Estado para denunciar al gobernador morenista Cuitláhuac García y a la virtual gobernadora Rocío Nahle por ‘persecución política’ contra sus dos hijos; uno, senador electo por Veracruz, y el otro, como diputado local.

En respuesta, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez calificó su amplia perorata como “un show”, una clara estrategia para tratar de desviar la atención pública y mediática de sus hijos prófugos de la justicia.

García Jiménez, quien le quedará a deber un abanico de asignaturas a los veracruzanos a cuatro meses de que concluya su accidentado y polémico gobierno, se desbocó para aniquilar a su adversario.

Hizo énfasis entonces que Yunes Linares tiene una cola muy larga que le pisen y, en lugar, de atender las denuncias en su contra, trataron de cubrirse con fuero a través de los cargos en el Senado y en el Congreso local.

Se deslindó de los proteccionismos y detalló que nunca ha utilizado el cargo para hacer campañas, como sí lo hicieron los Yunes. «Yo no hago leña del árbol caído, no tengo ningún interés en eso. Hay cuestiones de procuración de justicia que atender, que las atiendan».

Planteó que ante las amenazas que lanzó el padre de los prófugos de la justicia, la gente ya sabe cómo es esa familia.

Detalló que Yunes Linares no las presentó, porque dejó las denuncias y se fue, no se esperó a que le sellaran de recibido, quizás por temor a que también fuera detenido tras todas las denuncias por corrupto que tiene tras de él.

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