Chalecos rivales
Después de 11 meses de encierro recibí la vacuna contra el COVID en la CDMX. Durante las horas de cola pude constatar la politización de la vacunación y la polarización de las redes sociales. Chalecos en pugna. A poco de instalarme en la fila, se acercó un organizador con chaleco verde (atuendo usado por los promotores del gobierno de la CDMX) para marcarnos sobre la mano el número que nos correspondía. Era una forma sencilla de evitar los altercados habituales con quienes se quieren meter en las filas. Me correspondió el 250. Luego pasó un grupo con chaleco guinda de Servidores de la Nación (son 23 mil enviados del presidente recorriendo el país distribuyendo ayudas y becas a los más necesitados). Cuando el servidor vio el número refunfuñó: “está mal que les hayan puesto la inscripción en la mano. No forma parte del protocolo”. Andaba de mal humor porque los servidores habían sido marginados.
Leer más