El drama de más de mil 300 niños migrantes que cruzaron la frontera de México-EU y no han visto a sus padres
Más de 1,300 menores separados a la fuerza de sus padres en la frontera entre México y EU siguen sin reunirse con ellos seis años después, lo que representa casi una tercera parte de los que en ese momento sufrieron una de las medidas más radicales de la política migratoria del entonces presidente Donald Trump.
Un informe hecho público este lunes conjuntamente por Human Rights Watch, la ONG Texas Civil Rights Project y un centro de derechos humanos de la Universidad de Yale cifra en 1,360 los niños y niñas que nunca han podido ver a sus padres en todo este tiempo, y critica que la rendición de cuenta por aquellos hechos haya sido “nula”.
El informe equipara esa política llamada en su momento de ‘tolerancia cero‘ con la desaparición forzada (por la negativa a los padres a revelar el paradero de sus hijos durante años) y con la tortura, por ser fruto de una política “deliberada” de agentes del Estado para “causar sufrimiento grave con fines indebidos”.
Así, documenta casos concretos de funcionarios que practicaron las separaciones “como factor disuasorio para otras familias”, y de otros que intervinieron específicamente para mantener esa separación incluso cuando algunas agencias federales comenzaron a promover la reunificación familiar.
“Es escalofriante ver, en un documento tras otro, la crueldad premeditada que se introdujo en la política sobre separación forzada de familias -comenta Michael García Bochenek, abogado sénior de la división de derechos infantiles de HRW- Un gobierno nunca debe actuar contra niños y niñas para enviar un mensaje a sus padres”.