Campaña anticorrupción de AMLO para “cazar adversarios y acumular poder: revista The Economist
Foto: Presidencia.
- De acuerdo con The Economist, la estrategia contra la corrupción “muestra su dedicación a la lucha contra el saqueo, su talento para el teatro político”
FORBES / MÉXICO.-The Economist afirma en un amplio texto que AMLO utiliza su campaña contra la corrupción para ir eliminando opositores o gente que no son de su agrado.
La revista cuenta que desde 2003, el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) ha vendido autos y casas incautadas por el gobierno de México, principalmente de contrabandistas y evasores de impuestos.
“El SAE solían dividir las ganancias entre la policía, el Poder Judicial y los servicios de salud. Andrés Manuel López Obrador, desde el 1 de diciembre del año pasado, ha acelerado las cosas. Ahora se refiere al SAE como el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado. En junio prometió 25.7 millones de pesos de una subasta de bienes mal adquiridos a dos pueblos indígenas pobres en el estado sureño de Oaxaca. En una conferencia de prensa televisada, el Presidente entregó cheques gigantes a sus alcaldes”, dice.
De acuerdo con The Economist ese episodio dice mucho sobre el mandato de López Obrador al que considera que tiene un talento para el teatro político, de acuerdo con Sin Embargo.
“Muestra su dedicación a la lucha contra el saqueo, su talento para el teatro político, su indiferencia hacia las instituciones y su creencia en la virtud de la gente común, entre quienes se considera a sí mismo. ‘Para parecer que estaban luchando contra la corrupción, los gobiernos anteriores crearon muchas reglas’, dijo en la entrega del cheque. Los dos pueblos afortunados podrán gastar el dinero que quieran, sin supervisión. Los mexicanos ‘son personas honestas’, dice el presidente. ‘La corrupción ocurre desde arriba, no de abajo hacia arriba’. Su manera popular de combatir la corrupción está funcionando para él. En un momento en que los ciudadanos de América Latina se rebelan contra sus líderes, AMLO tiene una tasa de aprobación de casi el 60 por ciento”, dice la revista británica.