Basura de titanes
SINÁPSIS
¿No podría hacerlo otro?
-Homero Simpson.
Han pasado ya casi dos meses desde que el gobierno municipal de la capital de Veracruz, Xalapa, inició formalmente su histórica administración encabezada por MORENA. Y digo histórica no porque sea la primera vez que un gobierno presuntamente de izquierda toma las riendas de esta capital; sino porque es la primera capital en todo el país que la asociación política fundada por López Obrador tiene la oportunidad de gobernar. ¡Hasta se podría decir que somos pioneros!
Basta con recordar que, en 1997, se dio la transición, por primera vez, de un gobierno tradicionalmente priista, a uno de izquierda durante la gestión de Rafael Hernández Villalpando, por el PRD-Convergencia; continuando con Reynaldo Escobar, hasta que se dio el regreso del PRI, con Ricardo Ahued, en 2004. Mejores épocas.
Y que conste que para mí MORENA es de todo, menos de izquierda; no obstante, conviene hacer referencia a dichos antecedentes ya que, como he percibido en redes sociales, algunos simpatizantes de dicha organización política suelen olvidarlo y se apuran a justificar su visible incapacidad para gobernar y resolver problemas, con el origen de todos los males sin explicación coherente: el PRI. O, en otras palabras, echándole la culpa al que ya no está.
El caos que hemos atestiguado todos los xalapeños en días recientes, respecto al servicio de limpia pública, me recordó muy puntualmente un capítulo de Los Simpson (el cual lleva por nombre esta columna) cuando Homero se postula al cargo de comisionado de la basura. Harto de, según él, la monotonía en la cual el servicio de limpia pública realizaba su trabajo, un día decide postularse al cargo, prometiendo a la ciudadanía toda clase propuestas absurdas. Dirigidas especialmente al individuo perezoso, garantizaba que los propios trabajadores no solo recogerían la basura, sino que entrarían a las casas a hacer el aseo, limpiarían la ropa y recogerían los desechos de sus mascotas.
Su campaña fue todo un éxito y resultó electo. Sin ninguna preparación previa al asumir el cargo, y para llevar a cabo sus promesas, se gasta en menos de un mes el presupuesto de un año, cae en banca rota y el problema termina por explotarle en las manos, con la ciudadanía harta de él.
Por supuesto que el alcalde de Xalapa, don Hipólito Rodríguez, economista y supongo ex investigador de la UV, intelectualmente no es un Homero Simpson; sin embargo, su inexperiencia y aparente ingenuidad hacen la comparativa en ambos casos inevitables.
Los problemas de una ciudad no se pueden resolver solo con buenas intenciones; máxime, cuando se tiene cero experiencia y nulo conocimiento de lo que significa realmente la administración pública. Y esto es precisamente lo que me parece ofrece MORENA: inexperiencia de sus candidatos, descalificación a todos los que no comulguen con su credo y ocurrencias para la ciudadanía; sin más.
Entre la falta de pago a los trabajadores de limpia pública (provocando paros y afectaciones a la ciudadanía), los despidos injustificados, la contratación de elementos “extranjeros” (justificando pobremente que “no hay muchos xalapeños capaces”), el problema de los 200 millones de pesos en la presentación del presupuesto de egresos recién arrancando la administración; o lo más absurdo de todo: no pagar la luz del palacio municipal, se percibe una clara ausencia de ideas elementales y rigor profesional.
Y esto es de lo más preocupante sobre los hoy punteros para ganar la presidencia de la República: De ganar, ¿cuánto más de esto nos espera a gran escala?
Como dijera el eslogan de campaña de Homero: ¿No podría hacerlo otro?
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