Lo que viene

La Grilla en Tabasco.

En cuestión de 24, 48, 72 horas, el gobierno mexicano instrumentará nuevas medidas restrictivas, las que gradualmente se han ido adoptando ya. Hasta la tarde del martes, por ejemplo, diez gobernadores ordenaron la suspensión inmediata de clases en todos los niveles escolares. Pero lo que sigue, quizá ya para el fin de semana, es la declaración de cuarentena, dejando a salvo la movilidad que no se puede parar.

No nos espantemos. Incluso en caso de contagio de Covid-19, el índice de mortandad se mantiene por debajo de 5 por ciento y si se hace lo correcto, si atendemos además al ejemplo de otras naciones, al cabo de tal vez de unos tres meses las cosas tendrán que regresar a la normalidad. Cuidémonos, sobremanera, las personas con afecciones pulmonares, con diabetes, así como los hipertensos, los de la tercera edad, los que tienen su sistema inmunológico debilitado. Hagámoslo todos, porque no solo está el riesgo de contagiarnos, sino de llevar el contagio a nuestra familia, al centro de labores, a aquellos con quienes socializamos.

Estamos ante una pandemia que más nos alarma porque como nunca el mundo está interconectado, a diferencia de las registradas en los siglos anteriores. Las redes sociales, al igual que los medios masivos tradicionales nos saturan de información y desinformación. Es una desventaja, pero a la vez ventaja.

Por desfortuna, ni siquiera el sistema de salud pública de países de alto desarrollo como Italia y Alemania estaba preparado para eso que comenzó con un registro de dos, tres contagios, y que en cuestión de días se multiplicó en periodos de tan solo 24 horas.

Y la mayor afectación será, ya es, probablemente no tanto en el número de enfermos y decesos, sino de tipo económico. Las bolsas de valores de todos los países continúan derrumbándose. Donald Trump advirtió el pasado lunes de una inminente recesión económica global de la cual Estados Unidos no se escapará, y por simple lógica tampoco México.

Ojalá el Presidente Andrés López Obrador fuese más prudente y deje de correr riesgos innecesarios en su actividad cotidiana, porque no solo pone en peligro su salud, sino que podría ser vector de contagio. ¡Entiéndase! ¡Esto no es tema de disputas políticas, de lucha por el poder, de satanización al adversario! Es, sí, asunto de interés nacional.

Miremos hacia el exterior. Mirémonos en ese espejo. Ninguna divinidad hará lo que no hagamos por cuenta propia, apoyados solidaria, inteligente y de manera pertinente por el gobierno en sus tres niveles.

A la vuelta de pocos meses tendremos que volver a comenzar en un proceso de reconstrucción nacional, con un plan muy bien definido de reactivación económica en el que no existan más cuentas alegres.

Los gobiernos estatales y municipales deben tener muy claro que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público deberá implementar medidas de austeridad nunca antes vistas. Ojalá en un futuro no muy lejano se tenga en México, en Tabasco, en todos los estados, un sistema de salud de mejor calidad y en sincronía con el fenómeno de explosión demográfica.

Entre las medidas que se adoptarán en breve, está la cancelación de eventos religiosos masivos con motivo de la Semana Santa.

Lamentablemente, en esta gran emergencia y crisis quienes más sufran serán los pobres, los que viven al día, quienes tienen padecimientos crónicos que no pueden atenderse debido a que en la miseria no hay dinero para comprar medicamentos.

¿Qué espero yo, en esta circunstancia, de nuestras autoridades locales? Humildad, sensibilidad social, honradez; que recuperen y afiancen la confianza ciudadana. ¡Que cese la polarización y, además, que se actúe con los pies en la tierra! ¡Desterremos la soberbia!

Los individuos tenemos que poner nuestra parte al acatar las disposiciones oficiales: hay que estar atentos y abandonar la actitud complaciente que todavía este martes 17 de marzo se observaba.

Los alcaldes y en su caso el CEAS deben cumplir con la adecuada potabilización del agua. No vaya a ser que en esta singular circunstancia la situación se complique por desabasto del vital líquido y porque no se le agreguen los productos químicos indispensables.

Animo a todos y a cuidarse.

Twitter: @JOchoaVidal