Y, ¿cómo vamos, Sancho?

La Grilla en Tabasco.

Lunes 20, del primer mes de 2020. La bitácora del capitán registra solo problemas e incertidumbre. En lo económico, en inseguridad, en el tema de la corrupción, estamos como hace un año y ahí se nos viene a Tabasco la caravana migrante.

La Procuraduría de Derechos Humanos de Guatemala, única voz oficial al momento, reportó este domingo que las familias completas que entraron por El Ceibo -más de mil personas plantadas en esa frontera anunciaron huelga de hambre- serían trasladadas a Villahermosa.

Precisó que el mayor número de migrantes, en su mayoría hondureños, entró por Tenosique y los menos por Ciudad Hidalgo, Chiapas. El refugio jesuita La 72 tiene capacidad solo para 500 personas. El Presidente de México les prometió ¡cuatro mil empleos!

En Tabasco, por mientras, la cuesta de enero pega como nunca. Un catedrático de economía en la UJAT dijo en la televisora universitaria que es falso que el país registre cero crecimiento; que el Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática se equivoca -y los analistas expertos igualmente- porque no se toma en cuenta la economía informal. ¡De ese nivel!

A su arribo como rector, Guillermo Narváez Osorio tendrá que hacer una revisión a fondo, no nada más en lo que respecta al saqueo y quebranto, y atender el emplazamiento a huelga por revisión salarial y contractual de los trabajadores, sino además poner atención al nivel académico, sin más simulaciones.

Las administraciones municipales sufrieron para pagar nómina y lista de raya. Tienen encima los requerimientos de pago de Comisión Federal de Electricidad, laudos laborales y proveedores. Los recursos federales bajarán más allá del inicio de la primavera y de antemano se sabe que la Secretaría de Hacienda apretará más el cinturón.

En el caso de particulares, el programa Adiós a tu Deuda chocó con la realidad. El gobierno estatal reconoció lo que llamó errores. Para los usuarios del suministro eléctrico que recontrataron, la amarga verdad agobia: por mismo consumo con el anterior nivel tarifario, en la 1F ahora hay que pagar más, a menos que se utilicen apenas 125 kw al bimestre.

En la implementación también falló la famosa ley de plásticos: a alguien se le olvidó o no supo que había que emitir el reglamento respectivo e incluso hacer adecuaciones a la Ley Orgánica Municipal, antes del primero de enero. No corresponde a los cabildos hacerlo. En todo caso, los ayuntamientos serán coadyuvantes para aplicar la reglamentación estatal.

Los diputados actuaron, para variar, como levantadedos. Hicieron lo que se les ordenó. Ni leyeron la iniciativa. Y el área jurídica hizo mucho daño con tan tremenda novatada.

Resultado: la ley de plásticos es letra muerta; porque además, a la hora de la hora, la inmensa mayoría de los pequeños y medianos negocios evaden o simulan. Las tiendas de autoservicio y de conveniencia, así como cadenas farmacéuticas, aprovechan para vender, precisamente, bolsas de plástico bajo el engaño de que “son reutilizables”.

Se están empleando envases de unicel pintados de color crema que se dice que son reciclables, lo que no es cierto. En última instancia, al no existir reglamentación a la ley, toda sanción de la autoridad es susceptible de recurrirla y podría ser declarada inconstitucional.

Pero no faltará quien exclame: “Que ladren los perros, Sancho”.

Twitter: @JOchoaVidal

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