Los alcaldes

La Grilla en Tabasco.

Entre los diecisiete alcaldes de Tabasco que llegaron al cargo el cinco de octubre de 2018 la mayoría lo hizo con los ojos vendados, plenamente confiados en que dispondrían de vastos recursos. Empero, hubo quienes con base en su experiencia en la administración pública tuvieron de antemano plena claridad acerca de la difícil situación que enfrentarían y qué tenían que hacer de inmediato.

Se nos dificulta entender cómo es que en casi todos los casos se actuó con desenfado y también con soberbia, quizá con la idea de que tenían en sus manos a la gallina de los huevos de oro. Basta con ser habitante de alguno de esos municipios para estar enterado de que, al menos desde finales del siglo pasado, los ayuntamientos tienen que pedir anticipos presupuestales para salvar cada fin de año.

Aunado al crecimiento poblacional, el rezago en materia de servicios municipales, el hecho de que en tiempos de mayores recursos no se planificó y atendió con oportunidad problemas como el del drenaje y agua potable, los ayuntamientos acumularon demandas laborales y se abusó del poder para fines personales; de manera tal que, un trienio tras otro, en casi todos los diecisiete, los ex ediles defraudaron la confianza ciudadana.

El primero de julio del año pasado, la mayoría de los ciudadanos de esos municipios acudió a las urnas con la creencia ciega de que solo porque tuviéramos un Presidente de la República tabasqueño llovería presupuesto en el edén y que desde el Congreso del Estado se cuidaría que nunca más hubiere saqueo y sí el mejor desempeño de autoridades.

Así, por ejemplo, quienes eligieron al alcalde de Paraíso, Antonio Alejandro, no se preocuparon por investigar si el señor tenía alguna experiencia en la administración pública. Toño Caldo era conocido por ser antiguo militante del movimiento obradorista. No importó que careciera de educación media básica.

Igualmente, en Cunduacán todos sabían quién es la señora Nidia Naranjo Cobián. Como diputada local y subsecretaria de Desarrollo Social en el gobierno nuñista, quedó de manifiesto que sirve para gritar, protestar, pero tampoco tiene una preparación mínima. Quienes la han tratado conocen su soberbia y su nivel.

Hay casos que no dejan de ser curiosos: en Emiliano Zapata llegó a la presidencia un personero del negociante Armín Marín, quien instauró ya un cacicazgo de nueve años y va por más.

En Jonuta repite como alcalde -por tercera ocasión, porque durante los tres años anteriores gobernó a través de la esposa- Francisco Filigrana, el mismo que intercambió señalamientos públicos de corrupción con el hoy diputado Rafael Sánchez Cabrales, sin que hubiese consecuencias.

En Tenosique volvió a tener su oportunidad Raúl Gustavo Gutiérrez, el que durante el periodo del priista Francisco Abreu Vela hizo muy buenos negocios, según denuncia formulada en su momento por el actual director general del Conalep y también ex edil, Carlos Alberto Vega Celorio, traicionado a su vez por quien fue su funcionario. ¡Qué puerqueza!

En Cárdenas, después de ser derrotado varias veces en las urnas por los mismos que finalmente lo hicieron ahora alcalde, Armando Beltrán Tenorio no ha demostrado ser mejor que su antecesor perredista al que tanto cuestionó.

No tenemos elementos para opinar sobre la segunda gestión del alcalde de Jalpa, Jesús Selván. Más le vale estar haciendo bien las cosas, porque se sabe que existe mucho enojo ciudadano en ese municipio luego de la impunidad otorgada a su antecesor, Francisco Javier Cabrera, quien previamente, desde la subcoordinación parlamentaria del PRD, se hizo famoso por negociar cuentas públicas.

Evaristo Hernández en estos días anda muy contento por la apertura del mercado Pino Suárez, mas tiene muchísimos compromisos pendientes en Villahermosa, poblados, villas y rancherías en donde “juró” resolver infinidad de problemas. Imposible olvidar cómo se desmoronó el mentiroso Gerardo Gaudiano Rovirosa.

Tampoco sabemos cómo andan las presidentas de Nacajuca y Centla. Sí nos consta el trabajo de sus homólogos de Huimanguillo, Macuspana y Balancán. También ellos recibieron administraciones en problemas, pero con su experiencia y dedicación están dando buenos resultados.

Twitter: @JOchoaVidal

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