Contrapesos en los congresos: PRI y PAN tendrán que gobernar con mayoría de Morena

El rijoso y moralista gobernador de Veracruz. Foto: Especial.    

• Gobernadores del PRI, PAN y PRD han empezado a confrontarse con diputados de la mayoría de Morena en los congresos
• Veracruz, no es la excepción; el gobernador aliancista del PAN-PRD, Miguel Ángel Yunes Linares, impuso a chaleco al Fiscal anticorrupción con una minoría en el Congreso de 27 de 50 diputados
• El gobernador del cambio intentó después despacharse con la cuchara grande con la imposición de 12 magistrados y fue parado con la toma pacífica de las instalaciones del Palacio Legislativo de los diputados de Morena

 

El Congreso de Sonora aprobó reformas a Constitución del Estado, entre ellas la que permite a la Gobernadora vetar decisiones del Legislativo. Foto: Claroscuro.

POLITICOMX / MÉXICO.- El México político del siglo XXI plantea escenarios y retos inéditos: por primera vez habrá estados que cuenten con un Congreso local dominado por un partido opositor. Y no en un número menor: de 26 entidades donde se renovaron en la elección del 1 de julio, en 19 los diputados de Morena serán mayoría.

Esto implica que las reglas de convivencia política cambian o al menos se tengan que replantear; y por lo que se ha visto, no todos los gobernadores están dispuestos a tener un contrapeso.

En el panorama general, las entidades gobernadas por el PRI con mayoría morenista en sus Congresos son: Colima, Estado de México, Guerrero, Hidalgo, Oaxaca, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora y Tlaxcala.

En Baja California Sur y Durango, gobernadas por el PAN, también tendrían dominio de esa coalición, así como Puebla. En Michoacán, donde aún gobierna el PRD, también vivirán con una legislatura local dominada por Morena.

Para dimensionar lo que esto significa basta subrayar que Alfredo del Mazo será el primer gobernador mexiquense que deberá trabajar con un Congreso dominado por la oposición. O como en el estado de Hidalgo, donde por primera vez en más de 80 años de gobiernos priístas, con mayoría en el Congreso estatal, ahora Morena ganó las 18 diputaciones de mayoría relativa.

Los teóricos políticos plantearán que se llega al estado ideal de contrapesos entre poderes a nivel estatal. Pero las inercias, las costumbres y el temor de perder buena parte de su poder (así como privilegios) han generado episodios de evidente confrontación y que han derivado en actos de violencia política.

Un primer ejemplo es Sonora. El Congreso local saliente, sitiado por un grupo de choque priista de al menos 200 integrantes, aprobó una serie de medidas con las que el Legislativo estatal quedó a merced de los deseos del Ejecutivo, en este caso encabezado por la gobernadora, la priista Claudia Pavlovich Arellano:

– Destaca el “veto al presupuesto” donde el gobernador en turno de manera unilateral, está facultado para desechar la Ley de Ingresos y Presupuesto de Ingresos –previamente aprobada por los diputados–, si la distribución de los recursos no le favorece.

– Consiguió la creación de una “agenda legislativa conjunta con el Ejecutivo”, con la intención precisa de tutelar las acciones de los congresistas locales.

Aprueban en Sonora veto de Pavlovich. reforma.com

Por lo pronto Alfonso Durazo, en su calidad de senador electo, adelantó que van a combatir por la vía legal este tipo de disposiciones en el Congreso sonorense; desde ahora se perfila “una bomba de tiempo” política y legal que “estallará” en cuanto tomen posesión los legisladores de Morena.

Lo aprobado por el Congreso de Sonora pretende regular materias que escapan de su competencia, son contrarios a diversos precedentes de la @SCJN y contravienen disposiciones de la CPEUM. Dado lo anterior se harán valer las acciones necesarias para revisar su constitucionalidad.

 

Otros dos casos se vuelven emblemáticos. El 31 de julio, a toletazos y con gases lacrimógenos, granaderos de Seguridad Pública en Hidalgo y un presunto grupo de choque desalojaron a los diputados locales electos de Morena que habían tomado la sede del Congreso.

Buscaban evitar que la mayoría priista de la Legislatura local saliente sesionaran y votarán una iniciativa de ley del PRI congelada desde hace dos años; plantea que la presidencia de la Junta de Gobierno del Congreso sea rotativa, y así, Morena solo estaría un año al frente de ese órgano a pesar de que tendrá una mayoría absoluta. Esto se aprobó al día siguiente, el 1 de agosto.

La otra historia se vivió en Veracruz. Luego de que los próximos diputados morenistas tomaron la sede del Congreso, el gobernador saliente Miguel Ángel Yunes decidió no hacer la designación de 12 magistrados del poder judicial local; por la presión dejó en manos de su sucesor, el también morenista Cuitláhuac García, esos nombramientos.

Podrían ser solo incidentes locales pero demuestran reacomodos de fuerzas políticas y defensas de intereses ante lo que es un evidente cambio. Una asignatura de gobernabilidad que no debería dejarse de lado pues apenas van a entrar en tiempo y forma las legislaturas de Morena en esos 19 estados, la llave que tendría Andrés Manuel López Obrador para hacer reformas constitucionales.